Caminante haz tu camino al.....

jueves, mayo 03, 2007

¿Los blogs nacen o se hacen? Y las minas de Riotinto

Es importante saberlo. Ya que si nacen, al igual que se nace cantante o torero, no tenemos más que abrirlos y dejarlos desarrollarse por sí mismos. Sin embargo, si se hacen, como un ingeniero que tiene que estudiar sus cinco años más muchos otros de experiencia, tendríamos que preocuparnos porque vayan formándose y creciendo con mucho esfuerzo.

Por cierto, hoy he visto la película "El corazón de la Tierra" que recomiendo al 100%. Esta basada en una novela histórica escrita por el Onubense Juan Cobos Wilkins que tiene el mismo nombre. Las minas de cobre de Riotinto fueron propiedad de una compañía británica que implantó un sistema de producción ya prohibido en la propia Gran Bretaña debido a sus efectos dañinos para la salud y para el medioambiente. Esto produjo una revuelta popular a finales del siglo XIX. La revuelta fue reprimida por las fuerzas del orden y murió mucha gente. Pero esto fue callado por el Estado y no se pudo hacer justicia. Hoy me pregunto, que cuantas "minas de Riotinto" habrá en todo el mundo.

sábado, enero 06, 2007

Tengo un trébol de cuatro hojas



Tengo un trébol. Pero no es un trebol cualquiera. Tiene cuatro hojas. Algunos incrédulos me dirán que eso no existe, y yo les diré que tengo uno.
Lo tengo desde que mi madre lo encontró en un macetero de la casa vieja de su pueblo natal. Se supone que desde aquel día me da suerte. Si lo pierdo heriré mi talón de Aquiles y tendré que emprender una búsqueda que me llevará toda la vida para poder encontrarlo de nuevo.
No obstante, está guay esto de encontrar cosas que no suelen verse con frecuencia. Y saber que por casualidad te encuentras un trébol de cuatro hojas o un tío raro como el Fernando.

miércoles, diciembre 20, 2006

Yo no me vendo por dinero. Antes, me prostituyo.

En reiteradas ocasiones el hombre se contradice en religión, ética, ecología, amor, sueños. Quién puede explicar una boda Gay en el templo budista. Yo no puedo, y eso que la ví. Mientras Zapatero celebraba la aprobación de la Ley con un cigarrillo en su despacho, un socialdemócrata cree que con tijeras y jabón se acaba el paro. Un servidor, amante de la libertad, se aferra a la familia y al periódico. El republicano saluda al Rey y lo felicita por su labor democrática. Aunque Sabina tenga razón, hasta los anarquistas lo callan. El que fabrica bombas después las desactiva. El que predica la vigilia hizo la matanza. El que hace la Ley sabe la trampa, y la comunica a sus amigos. El pan integral con manteca colorá está que te cagas. Las choco-bananas se las comieron los criticones. Los cortos se quedaron en la mente, donde cada uno los entiende. El trabajo no es lo más importante en la vida, sólo paso la mitad de ella haciéndolo y me quejo porque no me gusta. Sin experiencia no hay trabajo y sin trabajo no hay experiencia. La vivienda está muy cara, pero sólo en sitios caros, Fuengirola es cara. Aún no he hecho mi primera declaración de Hacienda, claro que con mi titulación de filólogo me resulta complicado. Aún sigo siendo improductivo aunque me sé de memoria el concepto eficiencia. Los que luchan por un futuro mejor tienen poco miedo a perderlo, los que guardan la vida con celo siguen obedeciendo.
Ya no se me ocurre nada más así que voy a terminar con un poemilla que nos ayudará a ser más coherentes con la vida:
Por un lao er Peñafié,
que zi er Julian y la Pantoa,
niño apaga la tele,
¡no vea ezah cozah!

jueves, octubre 19, 2006

El sueño de Piccaso


Gran cuadro de Picasso. Una mujer sentada en un sofá, una minifalda, un pecho fuera y un beso apasionado con un pene que le sale de la barbilla. Personaje que parece sacado de la propia serie de South Park. ¿Os acordáis de la enfermera con el feto en la cara? Pues esto es algo así pero en lugar de feto un nabo erecto.
Por lo visto el magnate rico que tenía el cuadro valorado en muchos millones de euros un día se levantó con el pie izquierdo y le dio un codazo “involuntario”. Más de uno soñaría con darle codazos a las obras del pintor. La cosa es que Málaga y la sociedad del arte llora indignada.

miércoles, septiembre 20, 2006

Sí iré a Córdoba

....O a Cazorla. La verdad es que en la vida no puedes estar predefinido o predeterminado. A veces tenemos en nuestra cabeza una idea de las cosas. Creemos que las personas deben cumplir determinadas normas sociales como: casarse cuando se llega a una edad, ir a la universidad, ir a la romería, a la feria, que te guste el futbol, la fórmula 1 (recientemente instalada en la predeterminada mente de nuestra sociedad), que te guste bailar, ir a los sitios pijos donde va la gente "guay", etc.
Entonces, algunos nos damos cuenta de que no somos felices con esa vida, que hay muchas cosas que la sociedad nos impone con las que no estamos deacuerdo. Por lo que sufrimos crisis existenciales y nos sentimos solos hasta que encontramos una micro sociedad en la que nos sentimos tan bien como el Tio Gilito en el almacen de securitas (espero que lo hayas pillado Roberto).

El problema radica en que, aunque los valores y las costumbres son nuevas y molan más, en dicha microsociedad las ideas vuelven a estar predeterminadas. De manera que se vuelve a esperar que la gente cumpla una serie de normas, esta vez, "microsociales". Y otra vez vuelven a salir personas que no están de acuerdo con dichas normas preestablecidas.

Conclusión: "Open your mind o, dicho de otro modo, ábrete"

martes, septiembre 05, 2006

No iré a Marruecos

No sé a quién achacarle la fiebre, el vómito y la diarrea. Quizás la mahonesa, la porra, o la comida que no había. La calada y media del porro del gato pudo ayudar, pero no lo tengo claro. Creo que fue un mal de ojo, sí, eso fue. La muchacha que nos servía lo hacía con bastante mala leche. Dime tú que en una de estas que empezamos a pedirle cosas que no tenía me mira y piensa: "ojalá te sienta mal la comida".

La verdad es que algo pasó y me provocó este día y medio, que llevo ya, de locura febril. Además esto ha echo que me replantee el viaje a Tánger. Me estoy imaginando comiendo un kebak y tras eso vomitando como un condenao. Y entonces alguién me dirá: "pues tio eso se arregla fácilmente con agua y limón tol viaje". Y yo le diré el agua de Marruecos puede provocarme más vómitos y diarrea. Y entonces pienso que como coño nos curraríamos una diarrea o gastroenteritis en Tánger.

domingo, julio 09, 2006

LA MALDICIÓN DE LA FAROLA

Y allí estabamos nosotros, queríamos comprobar si lo que nos dijo el Sacerdote era verdad. Aquella religión tan absurda llamó tanto nuestra atención que queríamos verlo con nuestros propios ojos.Yo portaba la farola. Fernando a mi izquierda me seguía muy concentrado y con gran interés. Roberto no apartaba un ojo de mí y de la farola, temía por nuestras vidas.

Llegamos a aquella playa céntrica de la ciudad y nos dirigimos a la orilla. Allí se nos apareció el "gran señor". El viento comenzó a azotar con fuerza y la mar a cabrearse.Cada vez me costaba más seguir con la farola en mis brazos. Y entonces aquella imagen, aparecida entre rayos y nubes, nos dijo lo que el anciano Sacerdote nos había advertido.Quisimos huir, miré hacia un lado, vi a Roberto, miré hacia otro y no ví a nadie. ¿Dondé estaba Fernando?

Nos estaba tirando piedras más grandes que puños desde el otro extremo de la playa. En realidad todo el ataque se dirigía hacia mí. Pero eso no era de extrañar, yo era el portador de la farola y la maldición se había cumplido. Desde aquel instante Fernando había sido poseído para matarme. Para suerte mía no lo conseguía, tenía conmigo a Roberto que paraba con el pecho cada una de las piedras que me tiraban.


Sueño de verano